Geobiología y geopatías

Geobiología y geopatías

Geopatias

Derivada de los vocablos  “geo” (Tierra) y “pathos” (enfermedad, sufrimiento) la palabra geopatía se utiliza para denominar aquellos lugares,  en los que tras  largas permanencias sobre los mismos, pueden contribuir a la evolución degenerativa de una enfermedad e incluso a ser la causa directa de la misma.

La Geobiología es la ciencia que estudia la relación y efectos que las radiaciones, artificiales y teluricas, producen en nosotros y el resto de seres vivos.

Una geopatía es una zona de terreno que debido a las líneas de agua subterranea, desequilibrio telúrico, fallas, contaminación electromágnetica, no se alcanza en él los niveles mínimos energéticos requeridos para considerar ese lugar saludable para vivir, descansar o trabajar en él.

Cuando una persona recibe un exceso de radiación, sea natural o artificial (wi-fi, antenas alta tensión, antenas telefonía mobil, telefonos inalàmbricos, teléfonos mobiles, radio-relojes despertadores, consolas de video-juego, secadores de pelo, microondas, cocinas vitro) durante un periodo prolongado de tiempo, su salud se ve afectada, produciendo insomnio, migrañas, cansancio, transtornos del aparato digestivo, o incluso y dependiendo de la radiación a la que se exponga, enfermedades graves como leucemia, diferentes clases de càncer y esclerosis.

Estos datos están científicamente corroborados y estudiados y están al alcance de todos, lo preocupante de todo esto es que hay intereses económicos y hacen que la información no nos llegue como debería.

Hay geopatías que nos afectan que son de origen natural y son:

Por corriente de agua: De las geopatías naturales, estas son las más nocivas, se producen solo por agua en movimiento y provocan una radiación en la vertical de una corriente. Están presentes en más del 80% de los casos estudiados de enfermedades immunodeficientes y de enfermedades crónicas.

Por líneas Hartmman: La red Hartmann, está formada por una red cuadriculada, orientada N-S y E-O, que rodea toda la Tierra. Tiene dimensión variable, en torno a unos 2 / 2,5 metros de lado. Los puntos patógenos se sitúan en los cruces de las líneas. Las enfermedades que provocan son de carácter agudo y inflamatorio.

Por líneas Curry: La red Curry, igual que la red Hartmann cubre la Tierra, pero está orientada NE-SO y NO-SE. Su cuadrícula oscila entre 6 y 8 metros. Los puntos más patógenos son los cruces de líneas y su intensidad es superior a la de Hartmann. De la misma forma que esta, provoca enfermedades inflamatorias y agudas.

Síntomas de las geopatías

  • Insomnio
  • Cansancio al levantarse
  • Dolores de cabeza y/o espalda
  • Dolores reumáticos
  • Cansancio crónico
  • Problemas circulatorios
  • Problemas cardíacos
  • Nerviosismo y irritabilidad
  • Estado de ánimo depresivo

Las geopatías producen:

  • Perdida de minerales, vitaminas y oligoelementos
  • Dificultan la eliminación de toxinas. Las toxinas se acumulan en los tejidos y los destruyen.
  • Favorecen la candidiasis (micosis u hongos) y parásitos intestinales.
  • Con un tiempo de exposición de más de 10 años y una combinación determinada de factores geopáticos, se pueden llegar a desarrollar enfermedades degenerativas irreversibles.

No es necesario esperar a que surja la enfermedad para comprobar los efectos que tienen las zonas geopatógenas en nuestro organismo. Basta con situar a una persona durante unos minutos en una zona alterada y comprobar que sus defensas han bajado. Podemos utilizar técnicas como la kinesiología, aparatos como el Sonotest que mide el biocampo (radiación del cuerpo etérico de una persona) o el galvanómetro que que miden la resistividad eléctrica de la piel (en ohmios). Verificaremos que los músculos pierden fuerza, el aura se contrae y la resistencia cutánea disminuye. Con aparatos más sofisticados se puede comprobar que la exposición a lugares vibratoriamente bajos produce un cortocircuito en el cerebro.

La radiestesia, llega aún más lejos. Con unas simples varillas, no sólo podemos medir puntualmente la contracción que se produce en el biocampo de una persona situada en una zona geopatógena, sino que también nos permite localizar en el cuerpo de una persona las geopatías provocadas por la exposión continua a un lugar nocivo, antes incluso de que aparezca alguna dolencia. Es posible, por tanto, señalar la zona del cuerpo que atraviesa una corriente de agua o el punto que corresponde a un nudo Hartman. La persona lleva grabada dicha información, pudiéndose detectar en cualquier momento, no siendo necesario que la persona se encuentre en el lugar geopatógeno cuando se realiza la medición.

Una forma casera de saber si donde dormimos o trabajamos o simplemente nos sentamos a comer o ver la TV es colocar dos platitos con agua en la que se ha disuelto sal hasta saturación, uno en una zona que creamos alterada y otro en una zona neutra. Cuando tras unos días el agua se evapore, la sal del platito colocado en la zona alterada formará en gruesos cristales de estructuras sin ninguna armonía. Sin embargo, el situado en zona neutra formará cristales más pequeños repartidos uniformemente y de estructura armónica.

Cristina Morales

Fuente: https://sanacionnatural.net/geobiologia-y-geopatias/